Teo Estiatorio

La primera y única vez que fui a este restaurante muchos comensales terminaron histéricos por la mala atención; sin embargo, si se tiene paciencia las cosas resultan mejor de lo esperado, la comida no está mal del todo, pero no es uno de los sitios a los que quiera volver.

Me pareció buenisima la comida, el dueño del restaurante estuvo todo el tiempo pendiente de nuestra mesa, tanto asi que nos hizo degustar un delicioso postre al final, el lugar es pequeño, muy cómodo con un diseño muy lindo con varias matas!

Es un pecado que un restaurante tan bonito, quizás un poco frio pero muy agradable, tenga una comida que salvo algunas cremas no es la verdadera comida griega. Pedimos unos vegetales de berenjenas y zucchini, los cuales brillaban por su ausencia, en su lugar me trajeron una montaña de papas, a mi esposo el plato de pollo le conté tres pedacitos de pollo y llenaron el plato de tomates insípidos y papas fritas a montones y hongos crudos en mal estado, aunado a eso en su plato había un cabello; a mi amiga que pidió alcachofas, le trajeron un solo corazón de alcachofa nadando en una sopa con papas enteras, y el plato de pasta con mariscos y calamares estos dos últimos se quedarían en la cocina. La pasta estaba seca. La ensalada griega no tenía sazón. En realidad creo que posiblemente tuvimos mala suerte, porque el lugar es muy bonito y podrían sacarle más provecho. No me quejo de la atención, todos fueron muy atentos pero ese día no se salvó ni el pan porque estaba seco, viejo. A pesar de ser un restaurante nuevo comenzó un poco mal. Lamentable.

Comida muy regular. Ni buena ni mala. Estábamos totalmente solos y el servicio aunque atento, lento. El restaurante super bonito y con mucho potencial. Hay que meterle mucho mercadeo y entrenar mejor al personal.

Comida un poco fria, pero buena sazon. Servicio excelente.