Nueve

Excelente restaurante para compartir, la comida es excepcional, muy recomendadas las lumpias de pato. El lugar es bonito y acogedor y el servicio perfecto, muy recomendado

Excelente opción para tener una cena tranquila con la pareja o con los amigos. La gran variedad de vinos que tienen para ofrecer es sin duda un atractivo para los amantes de esta bebida. Los rollitos de ropa vieja y la mil hoja son unos platos que no se pueden perder.

Es un restaurante pequeño con pocas mesas, fijo toca hacer reserva. Esperaba mas de este sitio, el ambiente normal, el servicio pudo estar mejor. La carta maneja muchas entradas por lo tanto es ideal para ir en grupos de amigos o pareja y pedir varias entradas (estas son muy pequeñas) acompañadas de vino. Recomiendo, el taco de pulpo, tamalitos y los tabaquitos.. No Me gusto el risoto de cochinillo, costilla de res. No volvería a ir.

El servicio es impecable es como una boutique restaurante. Deberían igual tener una carta de vinos, si es muy variado pero para los que conocen es mejor tener la carta y decidir qué se quiere probar, ambiente boho chic de lujo

Es la tercera vez que visito este restaurante y cada vez Pedro me sorprende mas con sus platos, el salpicon de sandia es una sorpresa para los sentidos, los springrolls de pato con salsa de mandarina deliciosos. Vale la pena no ver la carta y simplemente dejarse llevar por los consejos de Pedro o de uno de los meseros. Otro plus es la posibilidad de disfrutar cualquier vino por copa.