Sir Frank

Siempre está lleno he ido ya más de tres veces y siempre nos toca esperar para que nos asignen una mesa, la comida si es deliciosa el perro pepperoni es una maravilla, todas las malteadas son espectaculares con sabores diferentes como Ferrero, kínder, dulce de leche, entre otras y por último las hamburguesas valen la pena son muy ricas y el tamaño es bueno.

La comida y su restaurante tiene demasiada propaganda para lo que es. No es una comida que uno vaya a decir ¡wow! Simplemente es algo muy neutro. Lo único agradable es el diseño del restaurante y las bebidas como sus malteadas, en sí, prefiero comer una hamburguesa en otro restaurante y con mejor precio

La comida es buena pero el precio es alto para este tipo de comida el ambiente es bueno pero pequeño si lo vemos precio vs comida daría un 3.5

El sitio es muy estrecho y nada acogedor. Esperamos alrededor de 30 minutos y nos sentaron en una mesa relativamente cómoda para dos (efectivamente éramos dos). A los 10 minutos nos pidieron que nos pasáramos a otra mesa, que supuestamente era más cómoda. Resultó ser la mesa peor ubicada del sitio, frente al bar, expuestos al frío de la entrada y al acceso de toda la gente; hicimos el reclamo y los meseros nos ignoraron repetidamente. Tratando de olvidar el impase, pedimos el chicken waffle, que no fue nada del otro mundo, y la hamburguesa Sir Frank, cuya carne estaba absolutamente insípida y tiesa. Las papas las trajeron excesivamente freídas, llenas de aceite y mal presentadas. Tuvimos la fortuna de que, por negligencia de la mesera que nos atendía, el postre que pedimos nunca salió, por lo que pudimos salir rápidamente de allí. No lo recomiendo en ningún caso y aunque la comida se vea deliciosa en las fotos, de sabor se quedan muy cortos.

Se supone que el servicio debe acabar hasta cuando se ha ido la última mesa. En este caso éramos de las últimas, fuimos a celebrar un cumpleaños, pedimos que nos llevarán un postre para la foto y nos dijeron que ya no había servicio de postres. El sitio es pequeño, si va a ir haga reserva o de lo contrario le recomiendo otra opción si no le gusta esperar. El chef que se encarga de limpiar los platos y pasar la orden no utiliza guantes y de pronto se mete las manos al bolsillo, toca mil cosas y luego limpia y organiza el plato, dimos la queja por supuesto.