Salvaje

Honestamente no me encantó, y con lo costoso que es eso le baja demasiados puntos. Siento que los ingredientes que usan no son tan buenos, entonces si bien los platos están bien conceptualizados el resultado es meh. Los postres y los rolls de sushi son malos en general, los niguiri y los buns son buenos, el tomahawk no es wagyu como dice el menú, el arroz es normal y los dumplings pueden ser interesantes, comimos bien pero la verdad no repetiríamos porque para ese monto esperamos fuegos artificiales.

Que buen nombre para una experiencia lamentable. No tienen sentido del cliente, la falta de consistencia en los platos,unos buenos y otros un dersastre. el costo alto que no guard relación con la calidad. Revisen todos sus procesos y la forma de cobrar, siento que cada que levanto los palitos me va atracar.

Es salvaje. De los mejores sino el mejor restaurante que hay hoy en Bogota. Recomendadisimo, no alcance a tomar una sola foto porque te sirven muy rápido y es tan pero tan Rico que de verdad es inevitable empezar a comer de una. Los Baum’s de short rib 10/10 los champiñones trufados 10/10 el choco al final delicioso... la atención demasiado buena no entiendo los demás comentarios. La música y ambiente es del ptas

No entiendo cómo catalogan a este restaurante como uno de los mejores de Bogotá. En mi opinión, es demasiado pequeño, ambiente no es nada especial y el servicio es muy malo. Hicimos una reserva para dos personas y nos dejaron en la barra durante toda la experiencia; la comida no sobresale a excepción de 1 plato. No volveré.

Hace rato no damos con un restaurante que nos sorprendiera. No teníamos tan altas expectativas, pero superó los pronósticos. Pedimos muchos platos para compartir y estuvieron demasiado ricos. Arroz vegetariano, pargo asado, dumplings de champiñones, camarones en salsa, coliflor, sushi de salmón con salsa de maracuya, carpachio de salmon, sopa de miso, postre de limón, volcán de chocolate. El servicio es demasiado lento, aunque los meseros amables y pendientes. El playlist muy flojo, aunque la decoración muy bonita. Lo recomiendo, pero con reserva previa.