Estoy decepcionada de este restaurante. Desde que llegamos tuvimos un impacto negativo, los manteles de las mesas estaban sucios así que nos toco buscar uno que estuviera decente. Nos pusieron maíz tostado y una mantequilla que según el mesero era para un pan que nos pusieron aproximadamente 15 minutos después. (La mantequilla rica, el maíz no mucho y el pan duro). Como entrada pedimos unos chicharrones de calamar de los cuales aun no entiendo el nombre porque no estaban crocantes. La fritura era un desastre, el único sabor que podías sentir era el del aceite viejo porque ni siquiera los calamares tenían sal. Pedimos un "ITALO": La pasta estaba bien de cocción, sin sal, tenía espárragos que estaban pasados de cocción, parecían un puré. Pedimos también un "Tallarin Saltado", el langostino no estaba limpio y en general no era un plato rico ni llamativo. La decoración de los platos muy básica, muchos elementos que no pertenecían al plato. La música no tiene nada que ver con el restaurante, pusieron la canción de la película "Frozen" Los meseros muy amables pero nunca preguntaron qué tal estaban los platos aun cuando dejamos uno entero. Al final pedimos un postre "TRES LECHES" estaba bien. Nos cobraron absolutamente todo aun cuando no lo habíamos comido y al fin nunca nos preguntaron qué tal fue nuestra experiencia. Los precios no tienen nada que ver con la calidad de los productos. Definitivamente, no volveré.
