Kathmandu

Ambiente con elementos muy hermosos; recargado intencionalmente para estimular el conocimiento de la cultura de medio oriente y la compra de artículos que conforman un bazar. Los platos no le hacen juicio al precio. El piso, baños y sectores iluminados se aprecian desprolijos. La atención debe mejorar.

Los platos aunque sencillos, todos son deliciosos. La decoración y ambientación del lugar invitan a quedarse y disfrutar de los shows de baile. De otro lado, aunque el personal es muy amable el servicio es demorado y en mi caso tuve inconvenientes porque no había servicio de parking.

El mejor restaurante de comida asiática, cuidan cada detalle de la decoración haciéndolo único y la comida deliciosa, suuuper recomendado el cordero. Por mejorar, tiene shows de danza árabe durante la noche, pero son muy cortos.

Excelente servicio, lugar bonito, comida deliciosa ....Salmón en salsa de maracuyá recomendado, salsa con sabor ácido, una muy buena opción

El ambiente, decoración y los bailes arabes son algo de resaltar, uno realmente se siente en otra parte. El restaurante como tal tiene un menú amplio, de presentación regular con sabores muy normales o extremos, nada especial. Las porciones son buenas pero no volvería. Lo recomiendo para tomarse unos tragos y fumar narguile, depronto para pedir falafel pero no mas. Debido al alto volumen es imposible hablar.