Es una buena opción de carne dentro de la plazoleta en la que la calidad de la carne resalta en sabor y textura. El servicio no es el mejor, no son tan atentos y olvidan las cosas. Si van a pedir raviolis, se demoran 40 minutos. Los platos también son un poco demorados. Sin ser el mejor restaurante del mundo, tiene un buen sabor y si le toca buena atención, va a salir totalmente satisfecho.
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