El Mexicanito

Que buen sitio...fuimos a desayunar ....muy buena decoracion ...virgen de guadalupe ...chavo...cantinflas ...etc El desayuno mejicanito ...muy completo ....tortillas de mil opciones ....y el chocolate en leche ...perfecto .....

EL lugar está muy bien decorado, es agradable y los meseros son atentos y amables, pero el cuanto a la comida es otro fracaso de alguien que abre un restaurante "mexicano" y pierde en el intento, si otro más para la larga lista en Bogotá. La comida es muy grasosa, platos grandes innecesarios , no hay sabores mexicanos por ningún lado, no hay siquiera salsas ( parte importante para la comida real mexicana) , hasta el picante que ofrecen da ganas de salir corriendo, muy simplón. Lo que medio probé sabía a grasa, las carnes y pollos están cocinados con guisos muy criollos, no hay nada que te despierte las papilas gustativas como un mexicano real, malo, malo. Lo único que medio rescato es la sopa de tomate que no está mal y tienen una opción con camarones, aunque le falta sabor: cilantro y chiles , pues es mejicana no colombaina.

Este restaurante ubicado el la zona del Polo presenta una propuesta mexicana no tan habitual. Fuera de los ejes gastronómicos tradicionales se encubierta cuenta con buena zona de parqueo, el restaurante tiene una decoración penada y acorde. El servicio no es el más sofisticado pero tiene elementos muy positivos. La comida se sale de los estándares de los sabores pero mantiene lo mexicano. Pedí el plato mas grande y variado tipo Sampler, quede satisfecho. Burrito donde lo principal era la carne, flautas normales, quesadillas de corrido muy sabrosas. Puntos para tener muy en cuenta. Los platos son muy generosos, es bueno preguntar para cuantas personas son, con uno comimos dos para un almuerzo normal. Eso reduce el costo promedio por plato. Para los amantes de la comida Méxicana es bueno probar de todo. Y para los seguidores de Degusta todo terrenos que van más allá de la marca y el renombre este tipo de hallazgos alimenta el espíritu de probar. Volvería, pero advierto que hay que ser muy abiertos y objetivos. En mi caso soy muy afortunado porque tengo una compra maravillosa que me acolita todas estas aventuras!

Una de las peores experiencias culinarias a la que me he enfrentado. Pésima atención, comida muy condimentada y platos exageradamente grandes.

Si eres de los que te quita el apetito ver que la comida se salga del plato, mejor ni vayas. Le hace falta mucho para ser auténtica comida mexicana. Como sirven tanto te terminas empalagando, el servicio deja mucho que desear.