Castellana 104

Jamás me imaginé que en un sitio poco recomendado fuera a encontrar una paella tan deliciosa como la que probé en este lugar. Llegué con las más bajas expectativas; primero por el sitio y segundo por las recomendaciones, sin embargo, a la hora de saborear la singularidad de ese sabor característico de una buena paella, sentí que me estaba comiendo la misma que había probado en un muy buen restaurante que lastimosamente hoy en día esta cerrado. Los postres deliciosos, el hecho de tener una repostería en el restaurante hace que la provocación sea ineludible.

El sitio tiene una variedad espectacular de pastelería, panadería, sándwiches y ensaladas. Aparte del menú del restaurante que queda al fondo del local. Pero estoy de acuerdo con los comentarios acerca del servicio, las cajeras te tratan como si te quisieran golpear. A pesar de que el sitio es bonito, dan ganas de salir de ahí rápido.

El desayuno y un brunch en este lugar son perfectos, los precios me parecen bajos para la calidad y la cantidad de los platos, el pan es exquisito y es el restaurante perfecto para un domingo

Buena opción para variar y desayunar rico. Los mini baguetes de queso brie con jamon serranos son 👌🏻 una excelente opción para los fines de semana y a un precio razonable

Un almuerzo de trabajo entre semana. Me pareció normalito. La comida buena sin ser nada especial y el servicio amable. El precio un poquito alto pero al fin y al cabo es uno quien decide ir allí.