El servicio fue muy atento. La comida superó nuestras expectativas. Recomiendo mucho el bife de lomo y el cordero. El flan de dulce de leche fue perfecto para cerrar la cena, delicioso y para nada hostigante en mi opinión.

No las considero sabrosas. Pueden ser bastante grasosas y con rellenos y sabores demasiado artificiales. Las instalaciones son muy amenas. Pero el producto no me resultó atractivo.

Opino que es necesario que los meseros sugieran un ceviche. , que promocionen la especialidad de la casa. Algunas porciones de mariscos o pescados no justifican el precio. Los apanados de sus entradas son muy sabrosos. Debo volver por sus ceviches, la atracción principal.

Compartir es la clave para disfrutar de este restaurante. Es preciso conocer los gustos del grupo para pasar un muy buen momento. Creo que lo mejor es acompañar las comidas con Inka Cola o una buena Chicha morada.

Las alitas son intensamente deliciosas, ya sea con hueso o sin hueso. Puede ir con todas las ganas y queda absolutamente satisfecho. El servicio resulta muy cordial, jovial y agradable. Aunque no es su especialidad, vi unas hamburguesas que quedarían pendientes.para una.próxima ocasión.

Es una opción económica y sabrosa. Algo complicado el parqueadero, también por el sector. El combo de hamburguesa es muy bueno. Debe mejorar sus bebidas, sobre todo sus jugos; a veces resultan bien y a veces no, como su limonada cerezada. En carnes y pescados son una muy buena opción.

¿Es posible abuchear en DeGusta? Es terrible. Lo único que incrementan son sus precios, pero el servicio decae, demasiado lento y eterno. La comida es cara, poca e insípida. Su ajiaco o churrasco actual son fantasmas de lo que alguna vez solía ser la oferta de este restaurante.

El sentido de un Teppan es el espectáculo y lo ameno del chef que está al frente del teppan. En Keiko, esto no existe. Simplemente acomodaron la cocina en otro lugar, y la acomodaron de mala gana. Nada memorable.

Quiero volver. Los pescados son sabrosos. La tilapia fue experiencia fácil de recordar en la boca. Sus porciones son realmente satisfactorias. Creo que su bar de jugos es uno de los mejores.

Visité este restaurante hace poco años en su sucursal en Cota y fue una experiencia aún memorable. El servicio en el Teppan fue un verdadero show, entretenido y muy ameno. Asistí con un grupo grande que se llevó esta misma impresión sin lugar a dudas.