Es un restaurante en donde prima un ambiente acogedor. No es populoso, por lo cual se puede tener una conversacion agradable con buena musica de fondo. Los pulpos son muy buenos y se puede tapear con una buena botella de vino aprecios razonables. Aunque tiene sillas para niños, no es un restaurante para ellos.

Lo he visitado en varias oportunidades, posee una lista de platos y de tapas que cumplen a cabalidad con la posibildad de escoger. El servicio siempre ha sido amable y calido, preocupados por la atencion sin ser invasivos. El ambiente es sosegado y no hay que esperar para ser atendido. La carta de vinos trae unas opciones económicas y con la posibilidad de hacer un buen maridaje. Es una muy buena opción para ir en pareja o con los amigos. Los pulpos son excelentes.

La comida no tiene variacion con los platos que se encuentran comunmente en otros rstaurantes de comida arabe y a menor precio. El mesero fue hostil en su servicio. El ambiente es agradable,pero si existen otras opciones con mejor comida y precios mas favorable, la tomaria sin pensarlo. No volvere a este restaurante.