Me encanta Central, un sitio donde siempre va uno a la fija. Buenas entradas, destacándose los ceviches y los tiraditos. Tiene 3 o 4 platos de langostinos muy buenos, excelentes pulpos y el servicio rápido y eficiente. Adicionalmente tienen buen servicio a domicilio. Recomendado.
Casi siempre me va bien en La Taquería. Pero hoy pedí 2 tacos al pastor y quedé sorprendido: una diminuta porción de carne, por 16000 pesos. Un verdadero atraco.
Buenas pizzetas y buena comida en general. Lástima que nos tocaron al lado unos muchachos hablando a los gritos, usando un lenguaje grosero y riendose a grandes carcajadas, irrespetando a los demás comensales. Algo debería hacer el restaurante en estos casos, porque pagar una cuenta alta para oir y sufrir a esta clase de vecinos es muy incomodo. Dificilmente volvería.
Interesante concepto. Me comí un buen sandwich de roastbeef, junto con un agua de jamaica con panela, ambos muy buenos. Un buen postre, buen café. Mi esposa pidió la pesca del día y quedó muy contenta. Recomendado. Todos salimos contentos.
Nada del otro mundo este restaurante de comida libanesa. Una carta muy predecible, sin ninguna innovación sobre lo que uno ha comido en otros lados, incluyendo sitios mucho más baratos. No encontré algo que mereciera pagar $50000 por persona.
Abasto sigue siendo un buen restaurante, pero el éxito no le ha caído muy bien. Es casi imposible conseguir una mesa, el servicio se ha vuelto lento e ineficiente y la calidad ha caído ligeramente. Hoy estuvimos desayunando con mi esposa y salimos algo desilusionados: el pan, que era espectacular, insípido y duro. El servicio, descuidado. Los baños, sin papel higiénico. La comida sigue siendo buena, no hay queja en ese aspecto, pero creo que deben pensar en mantener nivel y pensar más en los clientes. Para un desayuno de casi 90000 pesos para 2 personas, hay que mantener un alto estandard de calidad, que Abasto está comenzando a perder.
Me encanta la comida, pero es probablemente el restaurante más ruidoso de Bogotá. No por la música, sino por el impresionante ruido de una licuadora vieja, que a todo volumen trata de mostrar que los jugos están recién hechos.
Una lástima, difícil volver, salimos con dolor de cabeza y muy aburridos.
He estado dos veces en este restaurante y en ambas ocasiones me fue muy bien. Comida chifa, que no existía como opción gourmet en Bogotá, con una amplia gama de posibilidades. Fui por recomendación de Bogotá Divina, el mejor sitio para descubrir nuevos restaurantes en la ciudad. Nos gustó mucho el Taypa Saltado Tusan, mezcla de pollo, langostinos, cerdo, pato y verduras. Hay que pedir obviamente el arroz chaufa, que aquí es muy bueno. Todas las entradas valen la pena.
Volví otro día a las 6 de la tarde, a tomar un coctel y comer entraditas. Nos fue muy bien, buena música, excelente servicio, sin que estuviera lleno el sitio, que es como a mi más me gusta. Recomiendo esta opción por si quieren conversar tranquilos en un buen restaurante.
Volveré sin duda alguna a esta nueva opción que ofrece Leo Katz en Usaquén.
Estuve desayunando en el restaurante de Usaquén el fin de semana pasado. Nos llamó la atención ir a ver Suiza Ecuador en un restaurante suizo. Lo primero, es que no había ningún suizo, ni nadie más desayunando. Lo segundo, nos atendieron rápidamente y tuvimos una buena experiencia en el sitio.
El restaurante está un poco congelado en el tiempo, no es moderno, pero tiene una buena carta de desayunos y no hay queja de los platos o el servicio. Huevos pochés, raclette, tabla normalita de quesos nacionales, bebidas calientes, etc., servidas con prontitud y profesionalismo. Nada del otro mundo, pero sirvió conocer otra alternativa más de desayunos en Usaquén.
Central Cevichera (Calle 118)
Me encanta Central, un sitio donde siempre va uno a la fija. Buenas entradas, destacándose los ceviches y los tiraditos. Tiene 3 o 4 platos de langostinos muy buenos, excelentes pulpos y el servicio rápido y eficiente. Adicionalmente tienen buen servicio a domicilio. Recomendado.
La Taquería (Usaquen)
Casi siempre me va bien en La Taquería. Pero hoy pedí 2 tacos al pastor y quedé sorprendido: una diminuta porción de carne, por 16000 pesos. Un verdadero atraco.
Primi
Buenas pizzetas y buena comida en general. Lástima que nos tocaron al lado unos muchachos hablando a los gritos, usando un lenguaje grosero y riendose a grandes carcajadas, irrespetando a los demás comensales. Algo debería hacer el restaurante en estos casos, porque pagar una cuenta alta para oir y sufrir a esta clase de vecinos es muy incomodo. Dificilmente volvería.
Canasto Picnic Bistro (Chico)
Interesante concepto. Me comí un buen sandwich de roastbeef, junto con un agua de jamaica con panela, ambos muy buenos. Un buen postre, buen café. Mi esposa pidió la pesca del día y quedó muy contenta. Recomendado. Todos salimos contentos.
Ugly American
Buena experiencia, pero es de aquellos restaurantes de ir una vez, conocerlo y dar por concluida la tarea. No creo que vaya a volver.
Beirut
Nada del otro mundo este restaurante de comida libanesa. Una carta muy predecible, sin ninguna innovación sobre lo que uno ha comido en otros lados, incluyendo sitios mucho más baratos. No encontré algo que mereciera pagar $50000 por persona.
Abasto (Usaquén)
Abasto sigue siendo un buen restaurante, pero el éxito no le ha caído muy bien. Es casi imposible conseguir una mesa, el servicio se ha vuelto lento e ineficiente y la calidad ha caído ligeramente. Hoy estuvimos desayunando con mi esposa y salimos algo desilusionados: el pan, que era espectacular, insípido y duro. El servicio, descuidado. Los baños, sin papel higiénico. La comida sigue siendo buena, no hay queja en ese aspecto, pero creo que deben pensar en mantener nivel y pensar más en los clientes. Para un desayuno de casi 90000 pesos para 2 personas, hay que mantener un alto estandard de calidad, que Abasto está comenzando a perder.
Il Magazzino Italiano
Me encanta la comida, pero es probablemente el restaurante más ruidoso de Bogotá. No por la música, sino por el impresionante ruido de una licuadora vieja, que a todo volumen trata de mostrar que los jugos están recién hechos. Una lástima, difícil volver, salimos con dolor de cabeza y muy aburridos.
Madam Tusan
He estado dos veces en este restaurante y en ambas ocasiones me fue muy bien. Comida chifa, que no existía como opción gourmet en Bogotá, con una amplia gama de posibilidades. Fui por recomendación de Bogotá Divina, el mejor sitio para descubrir nuevos restaurantes en la ciudad. Nos gustó mucho el Taypa Saltado Tusan, mezcla de pollo, langostinos, cerdo, pato y verduras. Hay que pedir obviamente el arroz chaufa, que aquí es muy bueno. Todas las entradas valen la pena. Volví otro día a las 6 de la tarde, a tomar un coctel y comer entraditas. Nos fue muy bien, buena música, excelente servicio, sin que estuviera lleno el sitio, que es como a mi más me gusta. Recomiendo esta opción por si quieren conversar tranquilos en un buen restaurante. Volveré sin duda alguna a esta nueva opción que ofrece Leo Katz en Usaquén.
Chalet Suizo (Centro)
Estuve desayunando en el restaurante de Usaquén el fin de semana pasado. Nos llamó la atención ir a ver Suiza Ecuador en un restaurante suizo. Lo primero, es que no había ningún suizo, ni nadie más desayunando. Lo segundo, nos atendieron rápidamente y tuvimos una buena experiencia en el sitio. El restaurante está un poco congelado en el tiempo, no es moderno, pero tiene una buena carta de desayunos y no hay queja de los platos o el servicio. Huevos pochés, raclette, tabla normalita de quesos nacionales, bebidas calientes, etc., servidas con prontitud y profesionalismo. Nada del otro mundo, pero sirvió conocer otra alternativa más de desayunos en Usaquén.