Una delusion en todo. El martini tropical para nada alcolico. El trago de ron tenia sabor raro como amargo. El postre tiramisu malo. Una version de ellos dicen,pero realmente malo con licor y queso ricotta. Lastima porque me habia hecho mucha ilusion de este sitio y la decepcion fue maxima. Buuuuu.

Comida rica y postre delicioso. Vino bueno original italiano. Hasta el café estaba muy rico. El servicio es regular, falta personal, pero la atencion a la cocina es máxima. Inolvidable.

Comida decente, pescado sin particulares observaciones, ni en negativo ni en positivo. Carne sin condimentar al estilo de la sazón italiana. Con mi esposa lo hemos considerado un buen restaurante, mejor que muchos "grandes" de la ciudad, pero con el mismo problema de muchos, las recetas originales son muy manipuladas .

Un restaurante con ambiente tranquilo, silencioso y agradable. La cocina es italiana, con platos de la tradicion del departamento italiano de donde viene el dueño, Felice. Muy buena sazon y seleccion de los ingredientes. Lastimosamente los vinos son chilenos, pero la experiencia es positiva y aconsejada!

Un restaurante italiano que cuida mas de la presentacion y decoracion de los platos, que no del sabor y de la sazon. Como muchos otros, la mayoria de los platos no respetan la tradicional receta, pero si hay una variedad de platos superior disponibles en la carta. En cuanto a servicio, el ambiente es bastante frio y la estetica de los cubiertos es de calidad. Personalmente prefiero un plato sin decoraciones, pero con sabor inolvidable a una decoracion excelente con una sazon que no queda en la memoria.

No me ha gustado la comida, las alitas vienen con demasiadas salsas, que cubren el sabor real de la carne, las calificaria muy "invasivas". Nada de especial en cuanto a bebidas y carta, un ambiente mas de comida rapida que de restaurante. En el complejo el servicio fué bueno y cuidadoso, nada que decir para la forma de atender, pero el precio de los platos es exagerado para la calidad de la oferta. Es un ambiente nuevo, los muebles tienen todavia el olor a madera. Personalmente no volveré para un buen tiempo, esperaré que mas experiencia los inspire en la cocina.

Un restaurante de comida italiana como muchos en la ciudad de Medellin, con la mayoría de las recetas adaptadas a los gustos de los clientes, sin respetar la tradicional forma de cocinar italiana. Seguramente una comida con un buen sazón, pero mas bien colombo-italiana. También el vino seleccionado no era de los mejores, chileno. El café de buena marca, pero quemado por el agua demasiado caliente y, aunque pedido "ristretto" entregado demasiado largo y con un sabor malo.

Un restaurante italiano de verdad, con comida que respeta realmente lo que impone la tradición. Ademas de una carta de vinos exclusivamente italianos bien seleccionados. Seguramente un buen lugar donde aprender a comer bien italiano; el personal y el dueño son muy amables y a partes de la comida, se puede compartir una charla muy agradable.