La recomendación de calamares es muy buena para empezar a disfrutar de una experiencia de sabores muy colombianos que evocan el Pacífico. El plato fuerte de res fue un muy buen complemento para la entrada de mar, con toques muy sutiles y sabores sobre abrumadores, bien balanceado con en un típico arroz blanco y ensalada de lechuga. (Ñapa son muy buenos en recibir comensales solitarios)

El rissotto con paro confitado fue el plato que tuve el placer de comer. Fue un plato delicado con un buen balance de sabores. La entrada de corvado fue espléndida con un fuerte sabor a pescado. En general disfruté mucho mi experiencia en este restaurante, el cual recomiendo para una almuerzo o una cena de negocios, tiene la atmósfera adecuada para tal fin.

En salvo patria se combinan varias sensaciones y sabores. Primero, la ubicación es buena debido a que no cuenta con el movimiento de otras zonas. Segundo, su elección de luces y música hacen de su atmósfera agradable no app para comer, si no para tomar un trago y conversar. Tercero, su comida es buena. Los cortes de carne son tiernos y son dejados jugosos. (Recomendada la porqueta de cerdo, tiene un exquisito borde de piel de cerdo) Cuarto, el servicio es bueno pero falta para decir excelente. En resumen buena experiencia gastronómica en un punto diferente.

Luego de deambular por diferentes restaurantes buscando, la que para mi, es la mejor hamburguesa de Bogotá, he encontrado el paraíso para un amante de la carne y la tocineta. Desde la concepción de la carne, recomendada a término medio, hasta la cuidadosa tocineta ahumada, pasando por el pan hecho en casa y sin descuidar las salsas de autor; la hamburgués California de este sitio hace de la experiencia gastronómica única. Solo la recomiendo para el que guste de pocas verduras y una delicada atención a los sabores.

Este restaurante se caracteriza por tener una muy buena comida que ojalá igualara el servicio al cliente. Desde la perspectiva de una persona soltera que disfruta visitar restaurantes, me he topado con la situación más incómoda de verme rechazado en un sitio por no estar con alguien para compartir una mesa. Puedo entender el negocio detrás para que exista el rechazo, pero igual encuentro inaceptable la posición. Mi consejo para todos aquéllos turistas, mochileros y personas solteras (que les guste comer solos), es absténgase de degustar este restaurante si se encuentran solas.

El ambiente de New Orleans hace de la experiencia muy agradable, sobre todo en la música jazz y blues. El servicio de los meseros es muy bueno y la comida llegó en un tiempo muy razonable. La comida es buena, un poco graso el steak sobre todo las papas con el tomillo.

Muy buena hamburguesa. Sin embargo la experiencia de comer, de cuenta del personal, en el restaurante es un poco más incomoda, los empleados de la cocina se la pasan en constante charla que hace molesto sentarse al lado. El poco espacio hace que otros comensales se vuelvan un poco fastidiosos para disfrutar la buena comida que sirven.

Excelente experiencia. Las pizzas son de las mejores de bogotá, en especial la reina margarita. El gin and tonic, el mejor de bogotá.